Y ahora mírame: medio loco de miedo, a casi doscientos por hora por el Valle de la Muerte en un coche que nunca quise siquiera. ¡Maldito cabrón! ¡Esto es obra tuya! Sería mejor que te cuidases de mí, Señor... porque si no, me tendrás en tus manos.
Oh, ¿no les parece hilarante? Me dio demasiada risa cuando lo leí...
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Etto...Arigatou por vuestros comentarios...
¡Me ponen feliz!
Eh...dududududududududu
¡Los quiero!